5 claves para ahorrar
Es sabido el buen hacer de los judíos con el dinero, y el ahorro no iba a ser una excepción, por ello he investigado el método para ahorrar como los judíos y puedo adelantarte que una de sus principales premisas es que «el dinero genere dinero». ¿Sabes por qué?
Se les enseña desde prácticamente que nacen, a entender el dinero de otra forma, y es que pese a que el 0,2% de la población mundial es judía, no impide que la mitad de los diez individuos más ricos del mundo tengan raíces judías, y eso no lo digo yo, lo dice FORBES.
Tienen sistematizado en su cultura, una forma de tratar el dinero que les hacen tremendamente hábiles y es por ello que hoy voy a compartir diferentes Códigos para ahorrar como los judíos.

Lo que vamos a ver en este post:
- El método de los frascos o cuentas
- Vivir por debajo de tus posibilidades
- No te dediques únicamente a enviar dinero al banco
- No comerse las semillas que podrían darnos frutos
- Gastar dinero, no malgastar dinero
- Conclusión
El método de los frascos o cuentas
Para ahorrar como los judíos, empecemos por la forma en la que estos dividen su sueldo.
Para ello ellos lo dividen en 5 partes, antiguamente lo hacían en tarros, ya que se recibía el sueldo íntegro en efectivo, pero a día de hoy lo podemos hacer lógicamente de forma digital o cuentas.
Por lo tanto, imagina 5 frascos en el que en cada uno destines una cantidad de tu sueldo cada mes.
Frasco n.º 1; Diezmo
Como bien lo indica la palabra, el diezmo es el 10% de tu sueldo que deberías destinar a la iglesia de tu religión.
Frasco n.º 2; Donaciones
Como bien sabrás, los judíos son muy creyentes y ellos consideran que el dinero es un regalo que el mismo Dios les ha dado.
Por lo tanto, creen que esa riqueza que se nos ha otorgado tiene que ser compartida con los más necesitados.
– «Ok Sid, ¿pero cuánto hay que donar?»
A este tarro destinaremos el 10% del sueldo. Pero ten en cuenta una cosa…
… no siempre las donaciones deben ir a las organizaciones más grandes y visibles, puedes buscar aquellas que no tienen el presupuesto suficiente para invertir en marketing y permanecen más ocultas o simplemente puedes buscar gente en tu comunidad que esté necesitada y donarle dicho porcentaje.
Frasco n.º 3; Ahorro
Ya hemos contribuido a nuestra comunidad, por lo que podemos empezar a gestionar nuestras finanzas para nuestro propio interés.
Así que para el ahorro destinaremos el 10% de nuestro sueldo. Parece poco, pero si has leído mi post de cómo ahorrar un sueldo al año y sabrás del poder que puede llegar a tener ese 10%.
Frasco n.º 4; Inversión
Esto tiene mucho que ver con uno de los puntos que verás en este post, y es que debemos hacer trabajar el dinero.
Para ello, los judíos invierten el 20% de su sueldo mensual en negocios que hagan funcionar el dinero.
Pero eso no queda ahí, el dinero que sea fruto de estas inversiones, tienes que reinvertirlo para seguir generando más riqueza. A esto se le llama interés compuesto o efecto bola de nieve y puedes ver un ejemplo muy claro en mi post de ¿qué hago con los ahorros?.
Frasco n.º 5; Gastos
Y ahora sí, ya hemos sido disciplinados, hemos donado, ahorrado e invertido, es el momento de gastar el 50% del sueldo restante.
Evidentemente, no hablamos únicamente de nuestras necesidades más básicas como el alquiler o la alimentación, sino también podemos gastar en ocio, ropa…

Vivir por debajo de tus posibilidades
Vivimos en una sociedad en la que aparentar un nivel de vida que no podemos sostener en el tiempo, está de moda.
Si quieres tener un coche lujoso, vestir ropa cara y viajar por el mundo al mismo tiempo que te alojas en hoteles caros, todo ello con un sueldo mileurista, entonces es que no eres realista con tu situación financiera.
Esto suele conllevar al ahorro cero, a la deuda y a un estilo de vida en el que traes bienestar futuro al presente, es decir, que en un futuro estarás peor que a día de hoy.
Es simplemente insostenible.
– «¿Entonces que hago Sid? Mi vecino tiene un Porche, mi mejor amiga viaja 5 veces al año y mi hermano pasa el tiempo en tiendas de moda cara»
¡Entonces deja de compararte! Sé realista y cíñete a tu presupuesto, recuerda el ejemplo anterior de los 5 tarros. Si el 50% del sueldo que apartamos para gasto, no nos alcanza para esa vida de lujo, entonces tienes dos posibilidades.
- O buscas nuevas fuentes de ingresos que hagan aumentar la parte del gasto.
- O ajustas tu estilo de vida a tu economía.
En mi caso conduzco un coche de más de 14 años, es fiable, del tamaño que necesito y me genera pocos gastos. ¿Me gustaría conducir uno nuevo y de buena marca?
Que no te quepa la menor duda.
¿Por qué no lo hago?
Porque significaría invertir los ahorros que pueden ayudarme a ser libre financieramente en un futuro en algo que se devalúa a diario.
Así que haz como los judíos, mira al futuro y deja de hipotecar a tú yo del mañana. Vive por debajo de tus posibilidades, tal y como lo hacen ellos.
No te dediques únicamente a enviar dinero al banco
Es una de las formas más comunes que tenemos para ahorrar, «Guardar el dinero debajo del colchón». Pero, ¿es la más efectiva?
¡Para nada! Es una pésima forma de ahorrar y el año 2022 nos debería servir a todos como lección.
Para ahorrar como los judíos, tienes que saber, que el dinero pierde su valor con el tiempo, esto es debido a la inflación, y en el año 2022 lo hemos experimentado como hacía años que no lo hacíamos, por lo menos en España. Sé que algunos países de Sudamérica tenéis problemas sistemáticos con la inflación y que sois unos expertos en convivir con ella.
Por lo tanto, los judíos no envían simplemente el dinero al banco y lo dejan en una cuenta corriente.
Hacen que dicho dinero trabaje para ellos.
El dinero hay que invertirlo, con el objetivo de generar mayor rentabilidad que la perdida de valor que supone la inflación.
Para que nos entendamos, si la inflación está al 8%, deberemos alcanzar al menos ese porcentaje de rentabilidad para que nuestro dinero no haya perdido su valor.
En el mercado existen multitud de formas de buscar la rentabilidad de nuestro dinero y cada uno de nosotros debemos ser responsables de encontrar la mejor.
La bolsa, los bienes raíces o incluso negocios, son formas en las que los judíos suelen invertir su dinero para hacer crecer su patrimonio y, por lo tanto, más ricos cada día.
Busca la forma en la que los ahorros que tanto te han costado ahorrar no pierdan su valor.
No comerse las semillas que podrían darnos frutos
Tan importante es tener la disciplina de ahorrar, como tener la disciplina de no gastarte esos ahorros en sin sentidos, y esto, bien lo saben los judíos.
Si elaboras un pan con semillas, las cuales necesitabas para plantaciones que te garantizarían la comida del mañana, y luego te comes dicho pan, ¿qué habrás conseguido? Nada.
Solo habrás calmado el hambre de hoy, pero pasarás más hambre mañana.
El dinero funciona igual, intenta mantener un flujo estable de ingresos, aplica el sistema de los tarros e invierte para generar futuros ingresos. Esto ya lo hemos comentado en este post, pero, hay más.
No solo aplican esta forma de pensar con el dinero, sino que también con su educación.
Saben que si plantan una semilla en su cerebro, esta germinará y florecerá tarde o temprano y así estarán en la posición de obtener mayores ingresos. Ya sea porque esos conocimientos les han ayudado a hacer una buena inversión o simplemente porque han conseguido un ascenso.
No dejes de plantar semillas que te reporten beneficios en un futuro.
Gastar dinero, no malgastar dinero
A la hora de ahorrar como los judíos, hay que tener claro el concepto de que se puede gastar, pero no malgastar.
Ya hemos comentado que no hay que vivir por encima de nuestras posibilidades. Eso ha quedado claro, pero aunque nos lo podamos permitir, no hay que malgastar. Me explico, ¡atento!.
Resulta que has aplicado el sistema de los frascos, has pagado todas las necesidades básicas y ahora ya puedes disfrutar del dinero restante que en teoría es para simplemente gastarlo en disfrutar.
Para los judíos la sabiduría es oro, y es aquí donde tienes que ser más sabio que nunca, ¿que haces con ese dinero que corresponde al gasto?, ¿lo gastas o lo malgastas?
-«Suena mejor gastarlo que malgastarlo, ¿no Sid?»
Así es, evidentemente, la palabra Malgastar nos da una valiosa pista de que eso no es correcto.
El juego, alcohol o similares son una pésima forma de malgastar tu dinero.
Pero puedes «gastar» tu dinero en un buen libro o curso, que te cultivará y tarde o temprano te ayudará con algún aspecto de tu vida. De hecho, te recomiendo mi eBook Encantado, soy Mr. Éxito para disfrutar de una lectura amena y enriquecedora.
Por ejemplo, deja de apostar o jugar a la lotería, y, por el contrario, apúntate a algún club del deporte que te guste, mantendrás tu cuerpo sano, compartirás una afición con otras personas e incluso harás contactos que pueden acabar en relaciones profesionales.
Gastarás el mismo dinero, pero los resultados a la larga serán muy diferentes.
Por lo tanto, la parte del tarro que corresponde a gastar, gástala, pero no la malgastes.
Conclusión
Como ves, todos los puntos están relacionados entre sí de una forma u otra.
Eso significa que más que tips de ahorro, estamos hablando de una forma de vida que ha ido evolucionando con el paso de las generaciones.
No necesitas convertirte al judaísmo para ahorrar cómo los judíos, simplemente toma toda esa sabiduría, cambia el chip en tu mente, y empieza a enriquecerte.
Ya tienes los conocimientos, es decir, has plantado la semilla del conocimiento, ¡bien hecho!.
¡Te deseo un buen ahorro!
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